¿Te has detenido a pensar acerca del casi infinito número y tipo de microorganismos que existen en el suelo que pisas a diario? Según datos de la Organización Panamericana de la Salud (OPS), aproximadamente 1500 millones de personas están infectadas por microorganismos debido al contacto con suelo contaminado. 

Los suelos son un ambiente ideal para la proliferación de microorganismos, que en la cotidianidad representan un riesgo para la salud humana y animal, aunque en la agricultura también significan afectaciones para la calidad de los productos de esta industria.

Por eso, la desinfección de suelos es una práctica sumamente importante para controlar la propagación de estos microorganismos. Durante mucho tiempo, la desinfección de suelos se ha realizado con productos químicos, como el cloro o el formaldehído. No obstante, estos productos químicos pueden ser tóxicos para el medio ambiente y para la salud humana.

Entonces, ¿cómo logramos esterilizar de manera eficiente y no dañina a los distintos tipos de suelo? La respuesta es: ¡el ozono! Este es un gas natural con propiedades desinfectantes, oxidantes y desodorizantes, además de una alternativa ecológica y segura a los productos químicos tradicionales.

Aquí en Trioxy te explicaremos por qué es la mejor opción para una tarea tan crucial como la desinfección de suelos:

• Gracias a su amplio espectro, es muy eficiente contra una gran gama de microorganismos, ya que tiene efecto bactericida, fungicida y protozoicida. 
• No deja residuos tóxicos, ya que se descompone en oxígeno y no deja residuos tóxicos en el suelo.
• Tiene una eficacia rápida y segura como desinfectante.
• Es fácil de aplicar, ya sea por aspersión, nebulización o inyección.

Además, todos estos beneficios pueden aplicarse en suelos de diversos tipos, incluyendo suelos agrícolas, suelos industriales y suelos contaminados; superficies donde el ozono desinfecta áreas antes de siembras o plantaciones, además de controlar la propagación de enfermedades.

El ozono es tan poderoso, que incluso puede desinfectar suelos contaminados con petróleo e hidrocarburos, metales pesados (como el plomo o el mercurio), u otros contaminantes, restableciendo así la calidad del suelo.

El uso del ozono en la desinfección de suelos es una práctica segura y eficaz, sin embargo, es importante contar con equipos generadores de ozono de alta calidad, diseñados para uso en suelos, así como seguir las recomendaciones de expertos en la materia. Puede parecer algo complicado, pero sin duda, este elemento es una alternativa ecológica y segura, superior a los productos químicos tradicionales para tratar suelos contaminados e infectados.