Los seres humanos necesitan consumir líquidos que mantengan su organismo hidratado. Sin embargo, cuando estos se encuentran contaminados, pueden producir algunos efectos que ponen en riesgo su salud. Para evitar estas consecuencias negativas, es recomendable el empleo de un ozonificador de agua, el cual es usado para eliminar los contaminantes.
¿Cómo es el tratamiento del agua potable?
A pesar de todos los beneficios que aporta el consumo de agua en la vida del hombre, cuando no posee las condiciones adecuadas puede tener consecuencias negativas para su salud. Por tal razón, a nivel mundial las autoridades sanitarias establecen que es necesario el tratamiento del líquido antes de ser consumidas por el ser humano.
Entre los métodos más usados para tratar el agua destinada al consumo humano se encuentran la cloración y la ozonización. En la primera, se pueden utilizar el cloro licuado, la solución de hipoclorito de sodio (gránulos de hipoclorito de calcio) o los generadores de cloro, mientras que en la segunda se usa el ozono como elemento principal.
Muchos expertos opinan que el tratamiento del agua potable con ozono permite una desinfección más rápida y eficaz debido a su poder oxidante. A tal efecto, la Organización Mundial de la Salud (OMS), refiere que el beneficio de la ozonización radica en que es uno de los desinfectantes que posee mayor efectividad contra todo tipo de microorganismos, tanto unicelulares como pluricelulares.
El procedimiento para potabilizar el agua con ozono es la siguiente:
- En primer lugar, se pasa el oxígeno a través de un campo de electricidad que posea alta tensión con la finalidad de obtener el ozono.
- Cuando ya el ozono se encuentra concentrado en el aire seco, se debe establecer la dosis o concentración que se va a emplear; esta depende de la cantidad de agua que se encuentre almacenada.
- Se coloca la dosis de ozono directamente en la base del equipo donde se encuentra almacenada el agua. Para ello, se emplean equipos como los difusores porosos, filtros especiales y los deflectores.
- El agua ionizada es filtrada para incrementar la biodegradación y disminuir los residuos que pudieran quedar durante el proceso.
Principales efectos al ozonizar el agua potable
El tratamiento de agua potable por medio del ozono produce los siguientes beneficios:
- Destruye las bacterias que se encuentran presentes en el agua. Esta eliminación se efectúa de manera rápida. Por ejemplo, el E-Coli es destruido luego de 15 segundos de contacto con el producto, y con los Streptococcus tecalis el tiempo requerido aumenta solo cinco segundos.
- La exposición a una dosis concentrada de ozono permite que los virus queden inactivos en un lapso mínimo de cuatro minutos.
- El proceso de ozonización del agua genera que las materias inorgánicas, como algunos metales (hierro, manganeso y otros elementos pesados), el cianuro, nitrato o sulfuro, se oxiden y pierdan su poder. En caso de quedar algún residuo después del procedimiento, este puede eliminarse fácilmente a través de la filtración con carbón activado.
- Contribuye con la oxidación de materias de origen orgánico que se usan en la limpieza (como los detergentes) y los productos con fines agrícolas (herbicidas y pesticidas).
- El ozono elimina el color turbio que presenta el agua potable, mejorando visiblemente su calidad.
- Como efecto de la oxidación de las materias orgánicas que se producen con el ozono se excluyen los olores y sabores desagradables que el agua pudiera tener, haciéndola más apta para el consumo humano.
- El tratamiento por ionización se realiza directamente, de esta manera se disminuyen los riesgos de envío o transporte y, por ende, aporta mayor seguridad industrial.
Indiscutiblemente, el tratamiento del agua por medio del ozono representa una alternativa viable para elevar la calidad de sus propiedades, ya que en este proceso se destruyen los elementos que pueden producir enfermedades hídricas en el hombre.
También te va a interesar: Desinfección de agua potable en casos de emergencia